Una vida hecha papel
escombros-palabras ofrenda a una ciudad de sordos
de muladares carcomiendo el cielo que con trabajos Dios habló
como de arcilla el hombre deambulando por las calles
regando polvo sobre el polvo con la esperanza ciega
de poseer el mundo
Han caído pues estos golpes sobre la mesa de los aquí reunidos
golpes susurro ante la muchedumbre
golpes de voces blandas golpes de silencio golpes
arrebatados alaridos del poema
escarnio para sus carnes de cordero
torpes pasos a un camino equivocado
Se dirá con el tiempo que fueron un alma en pena
poetas que con infinitas lenguas intentaron seducir al mundo
vacios de carne y llenos de espíritu
sus corazones marchitos rodarán ciudad abajo
para ser carroña sobre el lodo
en que se construirá un imperio